La limpieza de una pared pintada de blanco requiere cierta preparación antes de empezar. Dependiendo del tipo de pintura que se aplique a la pared, hay que utilizar diferentes productos y técnicas para evitar dañar la pintura y dejar una marca indeleble. Entonces habrá que tener en cuenta las manchas, que sea de los dibujos de los niños hechos con rotuladores o un bolígrafo, una mancha de café o todavía proyecciones de grasas que puede haber en una cocina hay que adecuar. Hagamos un balance
El primer paso para lavar una pared pintada
Es importante quitar el polvo de las paredes con regularidad, incluso si no tiene intención de lavarlas después. Con el tiempo, el polvo se acumula y se adhiere a la propia pared, creando una película de suciedad. Esto es especialmente cierto en las cocinas, donde la grasa es un buen fijador y luego es difícil limpiar la pared pintada. No hay que descuidar el cuarto de baño también con la humedad. A continuación, hay que saber qué tipo de pintura se ha utilizado para la pared, pintura al agua, pintura acrílica, pintura de glicerina o vinilo y, por último, pintura de caseína. Es útil tener dos cubos, uno para enjuagar la esponja y otro con la mezcla para limpiar la pared, esto evita «ennegrecer» la pared a medida que se avanza.
Proteger el suelo
Limpiar con agua significa salpicar. Recuerda proteger el suelo para evitar que el agua sucia manche la pared. Si se trata de un suelo de baldosas no es tan grave, pero en una alfombra puede convertirse rápidamente en un problema. Utiliza mopas, láminas de plástico, etc.
Pintura al agua
Para este tipo de pintura es obligatorio limpiar en seco, con una esponja húmeda con vinagre blanco, aplicándola suavemente y cuidando de no empapar la pared, utilizando una goma de borrar para ciertos rastros.
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Pintura acrílica, glicerina vinílica o caseína
En estos tipos de pintura, puede utilizar agua jabonosa para lavar la pared. Puede utilizar bicarbonato de sodio en la mezcla para desengrasar la pared. No es aconsejable utilizar alcohol, ya que puede atacar la pintura e incluso provocar la aparición de anillos brillantes. Nunca frote la pared con fuerza, hágalo con suavidad y tendrá menos probabilidades de desconchar la pintura. Hay toallitas disponibles, pero son caras y desde el punto de vista ecológico están lejos de ser ideales.
El truco de una abuela para limpiar la pintura acrílica
El truco consiste en frotar una patata, previamente cortada por la mitad, sobre la zona manchada para hacerla desaparecer realizando movimientos circulares. Una vez que la mancha haya desaparecido, puedes lavar la pared con agua jabonosa. El almidón que contiene el tubérculo es el agente limpiador.
Metodología para limpiar una pared blanca
Para limpiar correctamente una pared pintada, es necesario proceder en pequeñas secciones. Para empezar, hay que limpiar la pared de abajo a arriba para evitar las rayas. A continuación, aclara la parte limpia con agua limpia con cuidado, evitando empapar las paredes. Por último, una vez limpia la pared, sécala con una toalla de rizo o cualquier otro accesorio que permita absorber la máxima cantidad de agua. Una vez que esta parte esté seca, pase a la siguiente y así sucesivamente.
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Limpieza de una pared blanca manchada
manchas de tinta
A los niños les encanta dibujar en las paredes, a los padres no tanto. Para eliminar la tinta, pase un paño empapado en alcohol por la «obra» para aflojar la tinta. Tenga cuidado y haga una prueba en una parte oculta de la pared para asegurarse de que el tratamiento no es peor que el daño.
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Restos negros de humo de chimenea
Añade un poco de amoníaco y detergente a un poco de agua tibia (un vaso) (no te pases de la raya) y frota suavemente las zonas ennegrecidas de la pared. No dudes en retirar el negro del paño para evitar que se extienda por la pared, ¡recuerda renovarlo! A continuación, aclare la pared y, por último, séquela.
Manchas y salpicaduras de grasa
Puedes utilizar un detergente clásico diluido en agua tibia o bicarbonato de sodio en forma de pasta (1/3 de agua 2/3 de bicarbonato) y frotar la pared suavemente. El amoníaco también funciona. Realice siempre una prueba antes de limpiar la pared para evitar sorpresas desagradables.
Sea cual sea el método utilizado, recuerda siempre proteger tus manos con guantes de uso doméstico, nunca es bueno estar en contacto directo con los productos aunque sean naturales, su acción detergente no se detiene y puede resecar tu piel.